Parece que fue ayer cuando Ruido Interno, Juan Carlos y Mamen, nos propusieron formar parte de este proyecto.
Abrí el escrito de Marcos Díez en mi ordenador a las 9 de la mañana, entraba el sol tímido por la ventana y yo quería tomarme ese tiempo para leer e interpretar cada palabra y empezar a imaginar.
Manuel era el protagonista, encontrarlo aquel día de casting en el estudio de ILUMINA FILMS, fue ver el principio del camino que posteriormente empezaríamos a recorrer juntos.
Escuchar las frases en boca de los actores en los ensayos, era un descubrimiento, cómo se movían, interpretaban, la manera de mirar… todo cobraba significado. Emocionarse, era parte del trato que hice cuando empezó este proyecto.
Con 3 Palabras lo hice desde el minuto cero.
Rodar en Espinama durante 3 días fue un reto, porque las dificultades no tardaron en aparecer, cambios de luz y climatología, poco tiempo…
La semana después de rodar el corto, pensaba que nada de lo que imaginaba había salido… aparecieron algunas dudas… pero sabía que en mi cabeza todo encajaba, solo tenía que sentarme en la sala de edición, como hago siempre, con el proyecto y buscar la emoción para componer la historia. Era mi momento. «3 Palabras y yo nos miramos de frente». Poco a poco iban completándose los minutos, 5, 10… todo encajaba.
El momento de poner BSO a nuestra historia fue lo más mágico del proceso de postproducción, y donde más acompañada me he sentido. Manuel Arce, comprendió en notas musicales perfectamente la obra. Espinama, el paisaje y el territorio, eran un personaje más y la música no podía ser menos, expresaba por sí sola.
(El primer visionado)
Bajé un poco las persianas del estudio, quería crear un ambiente cálido y apacible, como un pequeño cine en casa. Tenía nervios en el estómago, pero algo me decía que lo que había/habíamos hecho era puro y natural, nada podía fallar. Y así fue.
Cuando las personas se sentaban frente al corto no quedaban impasibles, se emocionaban, se preguntaban cosas y querían volver a verlo. Eso era un seguro a la hora de acercarnos al estreno, «algo» estaba funcionando.
(Estreno en Espinama, Picos de Europa, 2 de Septiembre de 2023, en el Festival II Rurales)
Compartir en este lugar era dar sentido a todo lo que habíamos hecho y la filosofía con la que comenzó este proyecto, estaba pensado para ser presentado allí.
(Estreno en el Festival Internacional de Cine de Santander, 15 de Septiembre de 2023, Filmoteca de Santander)
Se programó dentro del Festival. Nuestro corto, llenó la Filmoteca de Santander, y notamos el calor de los profesionales y personas de la cultura y el cine de Santander. Fue otra manera de dar cuerpo a nuestra historia.
A día de hoy no sé hacía dónde llegaré/mos con 3 Palabras, pero estamos satisfechos, contentos y orgullosos.
Os dejo uno de los discursos que escribí para presentar el corto en Santander.
Se llama: EL VALOR DE LO PEQUEÑO.
Esta película que vais a ver, es un corto pequeño, en un festival grande.
Pequeño,
porque nació con una pequeña idea,
un pequeño sueño,
que se hizo realidad gracias a la GRAN idea
de Ruido Interno,
de Juan Carlos y Mamen.
GRANDE, por el guión de Marcos Diez,
GRANDE, por la música de Manuel Arce,
GRANDE, por todo el equipo de personas que pensó un día que está pequeña idea podría ser GRANDE Y REAL.
Y yo misma cuándo empecé en esta aventura así lo creí y así me lo tomé, como algo, GRANDE.
Por eso hoy quiero dar las gracias a los creadores de cosas pequeñas que estáis por ahí sentados, músicos, montadores, directores de fotografía, actores, …
porque tenemos que creernos grandes para dar vida a nuestros pequeños pero sinceros sueños.El protagonista de nuestra pequeña película, es pequeño, pero emprende un gran viaje por la cicatriz natural del Desfiladero de la Hermida.